El següent article està escrit en castellà: Dentro de unos días tendrá lugar la segunda edición de Franquicia Futura, congreso organizado por la Asociación Española de Franquiciadores (AEF) y patrocinado por el Banco de Sabadell. La franquicia ha sido uno de los sectores que mejor ha aguantado la crisis”, explica Jordi Ruiz de Villa, uno de los abogados que mejor conoce el sector. De asesor jurídico de una cadena hostelera a dirigir en Jausas esta área de trabajo.
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El següent article està escrit en castellà: Dentro de unos días tendrá lugar la segunda edición de Franquicia Futura, congreso organizado por la Asociación Española de Franquiciadores (AEF) y patrocinado por el Banco de Sabadell. La franquicia ha sido uno de los sectores que mejor ha aguantado la crisis”, explica Jordi Ruiz de Villa, uno de los abogados que mejor conoce el sector. De asesor jurídico de una cadena hostelera a dirigir en Jausas esta área de trabajo.
Nuestro interlocutor lleva casi treinta años en esta actividad. “En aquellos años ochenta no se sabía muy bien cómo funcionaba la franquicia, te podías encontrar con que algunos contratos estuvieran en inglés. Fue el momento de organizarnos y que hubiera unas reglas de transparencia”, aclara.
Así nace la Asociación Española de Franquiciadores que impulsa la Ley de Ordenación del Comercio Minorista, la cual se aprobó en 1996 y que se ha ido actualizando a lo largo de los años.
“Vender una franquicia es un intangible, no es como un coche que lo puedes probar. En aquel momento se pretendía ofrecer la información adecuada para que ambas partes entendieran el modelo de negocio. Con esa información adecuada se fue configurando un sector en nuestro país que ha sido uno de los más potentes a nivel económico”, afirma Ruiz de Villa.
En la actualidad, las franquicias registran el 9 por ciento de las ventas minoristas y generan el 13,5 por ciento del empleo del sector, con casi 66.000 establecimientos abiertos y 1.232 cadenas, de las que el 30 por ciento ha dado el salto al exterior.
Abogado Ruiz de Villa: Desde fuera da la sensación que la franquicia ha soportado mejor la crisis que otras actividades económicas…
Es posible que así haya sido. Pocas enseñas han cerrado en estos últimos siete años. La llegada de la franquicia supuso en su momento la renovación del parque comercial tradicional. Muchas de aquellas tiendas de ultramarinos o de lencería evolucionaron hacia otro modelo al formar parte de diferentes cadenas de franquicia.
Al mismo tiempo, en dichas cadenas se observa que se destinan presupuestos a I más D, con lo cual la tecnología irrumpe en la gestión de los establecimientos de forma progresiva. Eso ayudaría a mejorar la distribución de productos y servicios.
La franquicia ha sido un gran dinamizador de la actividad económica manteniendo una proximidad con el propio cliente.
Y ese impacto de la crisis, ¿cuál ha sido?
Desde el año 2008 hasta la actualidad, las estadísticas señalan que no fue tan grave como en otras actividades. Entre 2010 y 2011 se mantuvieron el número de redes o cadenas de franquicia, locales y empleados. Estos datos crecen algo los dos años posteriores. Ahora el crecimiento es sensiblemente mayor.
Lo peor de la crisis ya pasó hace ya años. Cuando el parque comercial español sufría y se veía que se cerraban negocios enteros en barrios, la franquicia mantuvo su número de locales y de empleados. Es cierto que hubo cadenas que cerraron. Pero se equilibran con las que abrieron en esos años.
¿Cuáles son los motores de la franquicia a nivel de sectores que ofrecen más posibilidades?
En todo el mundo, los pilares de la franquicia pasan por la distribución de productos, de servicios y un modelo mixto. En el primero, hostelería, automóviles o ropa, en el segundo servicios de adelgazamiento, estética o webs y los mixtos son sobre todo restauración y hostelería.
En esa relación entre franquiciador y franquiciado, ¿se generan muchos litigios a lo largo del año?
Como bien sabe gestiono el llamado Observatorio de la Jurisprudencia de la Franquicia, donde está al tanto de los pleitos existentes en el sector. Recojo todas las sentencias que hay en España, en el 2014 hubo 60 arbitrajes, 30 en Madrid y otras tantos en Barcelona y unas 70 resoluciones de Audiencias Provinciales, frente a los 62.000 franquiciados, el porcentaje de litigio es pequeño. Alcanza el 0,017 por ciento.
Al mismo tiempo nos advierte que el franquiciado cuando hay problemas graves reclama la nulidad del contrato de franquicia. Es evidente que hay noticias que salen en los medios que tienen un gran impacto en su sector de actividad.
Lo que está claro es que cualquier abogado que trabaje en esta actividad debe conocer bien el sector y ser un jurista con experiencia en estos temas, para dejar claro que esos contratos son válidos conforme a derecho.
Casos mediáticos, como el de Vital Dent, ¿han hecho daño a la imagen de este sector?
La AEF desde el principio apoyó a Vital Dent por creer que su modelo de negocio era bueno y viable. De hecho, usted habrá podido ver una campaña en televisión de los franquiciados. Siguen funcionando, en estos momentos. El problema se centra en el dueño de la cadena que se ha descubierto que presuntamente realizaba malas prácticas en el negocio.
Otro caso que recodará fue el de Opening, academia de inglés, por unas inversiones mal financiadas. Abrieron setenta locales en un año y no pudieron pagar esa deuda a corto plazo y se generó el colapso que todos conocimos. Pero ese negocio de las academias se ganaba dinero realmente.
El problema está sobre todo en aquellas cadenas de franquicia que arrancan. Tienen pocos franquiciados y su modelo no está profesionalizado. Son las que tienen más riesgos. Es muy raro encontrar un colapso de una red entera. Cuanto mayor es la cadena más fuerza tiene para soportar el cierre de alguno de sus locales.
Con la franquicia pocos pelotazos hay, ¿es un negocio a medio plazo?
Es un negocio a medio plazo para el franquiciador y más a corto plazo para el franquiciado. El franquiciador sabe que es un negocio de resistencia y que en los primeros años tiene que invertir mucho dinero. A partir de los cuarenta locales se ve ya la rentabilidad y se optimiza realmente a partir de los cien.
En España tenemos un mercado con cadenas que tienen más de cien locales. La propia regulación de la que le hablaba ha ayudado a esta expansión en nuestro país. Desde sus orígenes la información previa antes de contratar ha sido obligada para las partes. Estas relaciones se rigen por el Código Civil que recoge la problemática junto con la citada Ley de Ordenación del Comercio Minorista.
En Europa y Estados Unidos, las diferentes organizaciones que gestionan la franquicia, algunas de ellas formo parte de ellas, nos reunimos una vez al año para analizar las novedades legislativas que afectan a esta actividad. Esto te permite tener un termómetro de lo que está pasando fuera y compararlo con el desarrollo en España. Nuestra normativa de 1996, desarrollada a través de Reales Decretos, sigue estando vigente. Es muy similar a la francesa e italiana.
Este sector fue en su día uno de los primeros que puso en marcha su Corte Arbitral, ¿qué balance puede hacer de la misma?
Fue una iniciativa que se puso en marcha en el 2002 tras un acuerdo entre la Asociación Española de Franquiciadores, la AEF, y la Asociación Española para la Defensa del Franquiciado. Con el arbitraje se lograban soluciones rápidas a los conflictos y que la relación entre franquiciador y franquiciado no se estropeara tras la judicialización del problema.
Rapidez y confidencialidad del proceso, asuntos gestionados por profesionales de la franquicia que conocen bien la problemática. El sistema es útil tanto en disputas domésticas como aquellas que surgen de la expansión internacional de las franquicias.
Desde el 2014 la Asociación Europea de Arbitraje se encarga de la gestión de la entidad arbitral y de su profesionalización mayor.
Es evidente que la franquicia ha hecho un esfuerzo importante por internacionalizarse.
Es cierto, eso es así, ahora hay cerca de un centenar de cadenas que prefieren salir al exterior para seguir su expansión internacional. En casi todos los países del mundo hay una franquicia española. En esta ocasión el trabajo de AEF con el ICEX, Instituto de Comercio Exterior para apoyar esta internacionalización ha sido muy interesante.
La internacionalización ha permitido a las franquicias situarse en mercados diferentes de los europeos y estadounidenses que no sufrieron la crisis como estos. Hablamos de Africa, Sudamérica o incluso Asia donde ese impacto fue menor, sin duda.
Respecto a la importación, ahora mismo hay varias cadenas australianas que van a llegar a nuestro país, revela la globalización ha producido una movilidad de los conceptos de negocio nunca vistos. Antes esto nunca sucedía. Los españoles por la crisis somos autoemprendedores y así han surgido muchos autonegocios que salieron de nuestras fronteras para triunfar.
Sin embargo, despachos de abogados que se franquicien no parece que vayan a cuajar…
Ha habido varias intentonas pero no es sencillo. El fundamento teórico de la franquicia es que tienes un saber hacer y lo reproduces. Si contratas un abogado, no contratas ese saber hacer. Eliges unas actitudes personales de cómo hacer las cosas.
Llevar un pleito tiene el mismo procedimiento aunque dos abogados te lo llevarán de forma muy diferente. No es un saber hacer lo que está detrás sino un “know why”, un saber por qué. Y las cualidades personales de un abogado en el interrogatorio no se pueden modelizar o transmitir. El saber cómo hacerlo no es el saber hacer del que hablamos. Es algo que no es transmisible.
No obstante, la franquicia ya es un nicho de mercado para la abogacía de los negocios…
Aún puede crecer más. En Estados Unidos, donde el comercio minorista ha desaparecido en favor de la franquicia, hay despachos de abogados dedicados a tiempo completo a dicha actividad. En nuestro país, aún a nivel jurídico no ha explotado como debiera pese al peso específico del sector dentro del PIB que es del 19 por ciento del total.
En algunos despachos como Jausas ya existe esta práctica vertebrada sobre profesionales especialistas pero ira a más en los próximos años. Es un nicho clave para la abogacía que quiera dar un servicio especializado y personalizado. Y es que la franquicia sigue cogiendo cuota de mercado al sector de la distribución.